La Diada de las TIC de Catalunya analiza el papel de la tecnología durante la crisis de la COVID-19
La Asociación Graustic ha celebrado el 29 de septiembre de 2020 el Día de las Tecnologías de la Información y la Comunicación en Cataluña en formato digital, abierto y gratuito para todos. Bajo el título «Tecnología para una vida más sostenible y saludable», la jornada de este año se ha centrado en el protagonismo que ha tomado la tecnología durante la pandemia mundial provocada por la Covid-19.
En esta línea, el presidente de GRAUSTIC, Dani Pujol ha asegurado que «el teletrabajo, las videoconferencias, las reuniones virtuales, las ventas online o la atención a distancia que nos han ayudado durante el confinamiento seguramente han venido para quedarse. En esta cambio de paradigma, la tecnología nos acompañará y tenemos que trabajar para que sea un motor de cohesión social que nos permita mejorar «.
¿Qué es el progreso?
Alfons Cornella, fundador del Institute NEXT y fundador y presidente de INFONOMIA, ha sido se ha encargado de la conferencia magistral de la jornada preguntando a los asistentes ‘debemos redefinir el progreso?’.
Cornella ha puesto de manifiesto que hasta ahora se ha entendido el progreso en base a cuatro grandes ejes: el crecimiento, el conocimiento, la eficiencia y la libertad. Pero estos pilares también conllevan ciertos peligros, como que grandes empresas tengan casi el control total de ciertos mercados; las nefastas consecuencias que conlleva el actual sistema productivo para los recursos de la tierra y el impactos en el cambio climático o bien el papel que tendrán los humanos en un mundo controlado por máquinas inteligentes.
«Los pilares del progreso están en cuestión y hay que repensar qué significa que una societario progrese y que lo haga de forma igualitaria. El cuadrante de la nueva definición de progreso debe venir definido por los conceptos equilibrio, dignidad, curiosidad y resiliencia «, afirmó Cornella.
Cornella ha animado a las empresas a pensar a largo plazo y a aliarse con otras organizaciones para hacer proyectos más grandes que dejen de lado el individualismo y que aporten un valor añadido. También ha destacado la necesidad de desarrollar tecnologías más sostenibles orientadas a la emisión 0.
En cuanto la educación, Cornella ha defendido que hay un cambio radical para no competir con las máquinas. «La única alternativa para los seres humanos es ser humanos en un mundo de máquinas inteligentes. Así, las sociedades que estimulen la curiosidades de sus niños serán las que más progresarán «.
«Lo mejor que puede hacer hoy en día un profesional senior es rodearse de jóvenes que entiendan el progreso de una forma diferente y que logren transformar la tecnología en nuevas oportunidades manteniendo el sentido de supervivencia para nuestro planeta», ha concluido.
Reflexiones, lecciones aprendidas y retos de futuro
La Diada de las TIC ha contado con una mesa redonda, conducida por la periodista Sílvia Cóppulo, para reflexionar sobre los efectos y la gestión de la crisis provocada por la Covid-19.
Meri Rosich, Head of Data Science, Visa Consulting & Analytics, en conexión desde Singapur explicó la buena gestión de este país durante la pandemia. «El modelo de progreso de Singapur es un modelo de comunidad. No hay un ‘yo’ sino un ‘nosotros’. Las medidas se han seguido de forma estricta y se han utilizado muchas tecnologías y políticas basadas en datos que han agilizado el proceso de recuperación «, aseguró.
El pedagogo y doctor en filosofía Gregorio Luri ha destacado que la educación ha sufrido un test de estrés del que no ha salido muy beneficiado. «Nos han faltado líderes claros y nos ha sobrado improvisación y las escuelas han adaptado de forma diferente. Aquellas que han sido capaces de virtualidad la presencia del docente son las que han tenido más éxito. Han sido más útiles los vídeos de 5 minutos que las grandes conferencias con multitud de alumnos conectados «, explicó.
En el ámbito de la salud, Lluís Serra Majem, catedrático y portavoz de la Comisión Covid-19 del Gobierno de Canarias, confesó que se hizo un confinamiento ejemplar pero una desescalada demasiado rápida. Ha puesto en valor el trabajo del comité multidisciplinar que se puso en marcha en Canarias en el mes de marzo y que ha conseguido mantener unas buenas cifras durante toda la pandemia. «La vacuna solucionará el problema parcialmente y lo más lógico es que las administramos a los colectivos más vulnerables y que poco a poco vamos adquiriendo inmunidad de grupo, ya sea de forma activa o pasiva. Posiblemente en 2021 servirá para administrar la vacuna a una parte importante de la población y empezar a controlar la pandemia pero siempre recordando las lecciones aprendidas que nos servirán para el futuro «.
A nivel económico, Guillem López-Casasnovas, catedrático de Economía de la UPF ha asegurado que los expertos no han estado a la altura y han mantenido criterios muy diferentes. «Tan pronto como se pueda volver mínimamente a la normalidad habrá un incremento del consumo y la inversión que vendrán acompañados de una importante dosis de optimismo». El economista también ha manifestado que los trabajadores autónomos han sido los más perjudicados ya que no han recibido ninguna cobertura de los ERTE. «Tenemos que conseguir que este tejido productivo no desaparezca porque cuando vuelva la demanda no nos encontramos que ya no están», concluyó.
A pesar de pertenecer a ámbitos muy diferentes, los cuatro profesionales han estado de acuerdo en que se necesitan prácticas reflexivas sobre qué hacemos, cómo lo hacemos y donde queremos llegar con el fin de adaptarnos de forma ágil a los retos de futuro.
Para finalizar, el presidente de GRAUSTIC ha animado a los asistentes a participar en la segunda parte de la jornada que se celebrará a finales de noviembre y donde se entregarán los premios Graustic 2020 en diferentes categorías.